Por Juan Giglio
El triunfo del régimen - comandado por el AKP - frente a
la intentona golpista del mes de julio de 2016, puso al oficialismo la ofensiva
contra el movimiento de masas. Debido a esta coyuntura favorable, el ejército
turco aplastó libertades democráticas, militarizó las ciudades kurdas y
encarceló, torturó y asesinó a cientos de activistas. Erdogan aprovechó la “volteada”
para modificar la Constitución, mediante un plebiscito, y hacerse elegir
presidente, un paso adelante en el sentido de su pretensión de convertirse en
el “Sultán” de la reconstrucción del Imperio Otomano. (Leer todo)
No hay comentarios:
Publicar un comentario